¿Por qué eligió automatizar la tienda del museo de perfumes?
Elegimos equiparnos con el robot Pharmathek porque queríamos ofrecer una experiencia de compra completamente innovadora. Hoy, para destacar en el mercado, es importante ofrecer no solo productos sino experiencias. Y eso es exactamente lo que hace el robot: más espectacular la fase de entrega del producto, y crea un enorme valor añadido, tanto en términos de experiencia del cliente como de imagen de la tienda, ahora percibida como altamente innovadora y moderna.
A esto se suman ventajas innegables desde el punto de vista de la gestión de inventarios, como un inventario en constante actualización, un almacén compacto y siempre ordenado y una reducción sustancial de robos.
¿Por qué confió en Pharmathek?
Elegimos Pharmathek en primer lugar porque es una empresa de gran fiabilidad que nos ha dado un altísimo nivel de seguridad, muy importante para aquellos que, como en una boutique como la nuestra, no pueden permitirse retrasos o dificultades.
En segundo lugar, porque nos ofreció un altísimo nivel de personalización tanto técnica como estética. Gracias a su compromiso hemos inventado una nueva forma de entregar el producto a través de envases de vidrio giratorios, muy elegantes y que permiten entregar el producto directamente al cliente.
¿Cómo funciona el proceso de compra del robot?
Es muy simple: los asistentes de ventas ayudan a los clientes a elegir la fragancia y luego, utilizando la tableta que tienen a su disposición, solicitan el producto y la cantidad enviando el pedido al robot a través de Wi-Fi.
Una vez realizado el pedido, se activa el brazo mecánico, se desplaza por los diferentes estantes y recoge el producto solicitado, para luego colocarlo en el recipiente de vidrio deseado. Una vez que el contenedor ha girado sobre sí mismo, el cliente puede recoger el producto con sus propias manos.
Una vista verdaderamente increíble.